El «Fast Fashion» o moda rápida ha desatado una larga conversación en cuanto al impacto que la industria de la moda tiene en el medio ambiente.
Desde algunos años la moda rápida se ha convertido en la alternativa de consumo favorita de gran parte de la población.
¿Cómo está afectando el «Fast Fashion» a nuestro planeta?
Hablar de «Fast Fashion» o moda rápida es hablar de modelos de consumo, y por lo tanto, de sobreexplotación, tanto de recursos como de mano de obra.
Con el auge del e-commerce, el «Fast Fashion» se ha convertido en una alternativa para adquirir ropa a bajo precio con calidad «desechable» de forma rápida y fácil desde lugares alejados.
Aunque se trata de una buena opción para adquirir ropa accesible, la problemática del «Fast Fashion» no está en el hecho de que brinda a las personas una alternativa «barata» para vestir y calzarse, sino en el consumo excesivo basado en tendencias.
Actualmente, la producción de ropa es responsable del 10% de la emisión de CO2 en el planeta.
De acuerdo a New Textiles Economy, en el año 2000 se produjeron 50 mil millones de prendas de ropa, mientras que en 2015 esta cantidad se duplicó llegando a producirse más de 100 mil millones de prendas.
La sobreproducción de ropa ocasionada por el Fast Fashion representa un peligro para el medio ambiente por diversas razones, las más alarmantes son:
– Sobreexplotación de recursos naturales en periodos de tiempo acelerado.
– Uso de químicos y productos sintéticos que terminan en mares, océanos y ríos.
– Producción del 10% del CO2 generado en todo el planeta.
– Acumulación de desechos no biodegradables en vertederos.
– Contaminación de aire y suelo debido a la quema masiva de ropa en vertederos.
Según los reportes de Greenpeace, un aproximado de 500 mil toneladas de microplásticos son depositados en los océanos a través de la ropa que lavamos.
Recomendaciones para comprar ropa de forma consciente:
– Elige prendas que puedan ser útiles por periodos de tiempo largos y no sólo por tendencia.
– Elige consumir productos locales.
– Dale preferencia a la ropa fabricada con materiales que no resulten tóxicos para el medio ambiente.
– Compra tu ropa basándote en tus necesidades y no sólo para acumular.
– Decídete por prendas o calzado de calidad media a alta para prolongar su durabilidad.
¿Qué te parecieron éstas recomendaciones?